Fuente: Kristina Tripkovic/Unsplash
depresión Nunca “cierres la tienda”. No, al igual que Denny’s, estamos abiertos las 24 horas del día, los 365 días del año.
Necesito saberlo. Experimento esto de una forma u otra todos los años. No dura mucho, no es tan intenso como antes, agradecido contra él. Pero todavía vuelve. Es molesto cuando eso sucede. realmente molesto Aquellos de ustedes que han experimentado depresión clínica sabrán a lo que me refiero. Los seres queridos que sufren de depresión también saben a lo que me refiero.
Operación “Recuperación”
Al igual que en años anteriores, esta temporada navideña está repleta de fotos familiares despreocupadas de Instagram, música interminable de Chipper Mall y películas de Hallmark como Single All the Way que son tendencia en Netflix.
No tengo nada en contra de la temporada navideña per se. De hecho, hice todo lo posible para moderar la relación amor-odio este año con las vacaciones. “Traje de vuelta la Navidad” (ej. salvia sugerido por un amigo). Tuve la temporada a mi manera. Mi mantra: sin presión, no delito, yo “no debería” yo mismo. No envié una tarjeta ni horneé tres tipos de galletas. Ni siquiera hice este típico paseo el primer día de nieve.
Pero me quedé con Michael’s Craft Shop y envolví cuidadosamente mis regalos. la creatividad, y un montón de Jingle Bells. Pero eso es porque me encanta envolver regalos. Encendí y decoré el árbol en la mesa de mi abuela y prendí fuego a la puerta principal al azar. Martha Stewart ciertamente no vive aquí. Y eso está bien conmigo.
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Golpe invernal de depresión
Suelo sufrir unas semanas de depresión en noviembre, de nuevo en enero ya veces en febrero cuando la luz se desvanece. Tenías que adivinar. El invierno no es mi estación favorita. La depresión de diciembre es casi un hecho. Unos días antes de la Navidad de este año, sentí que el dedo de la sombra tiraba lentamente de mí.
Siempre encuentro una razón por la que esto puede suceder. Tal vez por qué se retuerce a mi alrededor como una bufanda que me pica. Este año es mi primera Navidad de verdad sin mi marido, que ahora es mi “banda antigua”. Ambos estuvimos de acuerdo en que “ex” sonaba demasiado como un verdugo o una muerte horrible. Así que decidimos que yo era su “era-esposa” y que él era mi “era-banda”.
Romper fue un movimiento inteligente, pero eso no significa que no sea sin tristeza. Estuvimos en una relación de 20 años. Eso es mucho compartir galletas dulces.
La paradoja de la búsqueda de la felicidad
El problema ahora es que me enfrento a esta depresión verde opaca y al coraje abnegado que se ha alojado en cada parte de mi cuerpo. Oscilé entre huir de él, esconderlo, respirarlo, analizarlo en exceso, enviar mensajes de texto al respecto y, finalmente, “comenzar una rutina” al respecto.
La última opción me da los mejores resultados. Frustrantemente, cuanto más lucho por 1) comprender y reflexionar sobre por qué estoy deprimido y 2) sentirme menos deprimido, más deprimido me vuelvo. ¿Alguien involucrado?
La cruel paradoja que busca felicidad. Cuanto más tratas de sentirte feliz, más lejos está la felicidad y más desanimado te vuelves. Cuanto más me culpo por no poder salir de mi depresión y mis problemas, más trato de salir de ella. Entonces el círculo vicioso se repite.
básico
Incluso si tiene más de 20 años de experiencia con la depresión gestión equipo, terapia, buena idea, todavía me olvido de relajarme y dejar que mis síntomas de depresión desaparezcan como los síntomas del resfriado. En mi depresión, no puedo recordar que todo lo que tengo que hacer es poner un pie delante del otro, hacer todo lo posible para soportar la incomodidad y la incertidumbre, y permitirme sentir mis sentimientos.. asco yo se. Pero la única salida es pasar, ¿no? No hay desvíos.
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Y lo más importante, sé lo más amable posible conmigo (o al menos recuerda a alguien que haya sido amable conmigo porque no puedo despertar la autocompasión).
Tengo a mi consejero, Hard-ass Andie, que me entrena: Esconderse debajo de las sábanas y no salir de la cama puede ser reconfortante temporalmente, pero a la larga solo empeorará su depresión.
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Así que un día, hace tres semanas, cuando aún estaba deprimido, me desperté discutiendo sobre los beneficios de levantarme de la cama con una hora extra de sueño. No es poca cosa cuando tu cuerpo se siente como cemento en un edredón.
yo soy mi medicamento Le envié un mensaje de texto a mi amigo para que sea mi amigo de registro. Le dije que iba a correr, tomar una ducha (lo que requiere mucho esfuerzo cuando estás clínicamente deprimido), almorzar y empezar a trabajar. En mi tiempo, no había tanto esperanza como una estructura que pudiera construir esperanza.
Hacer estas cosas no hizo que mi depresión desapareciera mágicamente, pero me hizo sentir que no me pertenecía. Tengo algo que decir en mi vida y puede que no siempre sienta lo que siento, pero tengo libre albedrío. Esta es otra canción de Hard-Ass Andie. Ella me recuerda que soy poderosa y que tengo opciones en mi vida.
sufrir depresión o sentirse “solo” deprimido; Sólo, recuerda que no tienes que averiguar por qué. No tienes que luchar para cambiar tu estado de ánimo. En cambio, recuerda que tienes libre albedrío.
Puede sonar como una gran mentira. Pero estoy aquí para decirles que ese no es el caso.
Pasaron unos días y comencé a sentirme mejor acerca de usar mi agencia para tomar decisiones en la dirección correcta. Cuando estamos deprimidos, podemos dar un paso a la vez y continuar con nuestras actividades. Sí, es incómodo ya veces hasta oscuro (hablo por mí mismo). Pero hacer pequeñas actividades diarias ayuda a pasar el tiempo mientras la depresión está fuera de nuestro sistema.
